La creación de una megatendencia: Episodio 1

Siete factores clave que impulsan la megatendencia de las energías alternativas

Para entender por qué el desarrollo de las energías alternativas representa una megatendencia sociopolítica, tecnoeconómica e ideológica moderna, es importante examinar las fuerzas motrices que las impulsan. En aras de la simplicidad, he reducido estas fuerzas a 7 impulsores clave de la megatendencia. Estas fuerzas motrices no sólo son la esencia de la megatendencia de la energía alternativa, sino que también constituyen la propia megatendencia de la energía alternativa.

1. La insaciable demanda de energía 

No es de extrañar que el consumo actual y futuro de las energías renovables esté en correlación con la fluctuación de la demanda y la oferta de combustibles fósiles y, en cierta medida, de la energía nuclear, lo que hace que el aumento de la demanda de energía sea uno de los principales motores de la megatendencia de las energías alternativas. Aunque la demanda mundial de energía se redujo durante la pandemia de COVID-19, está previsto que se recupere este año hasta alcanzar los niveles anteriores a la pandemia. La demanda de electricidad se dirige a su crecimiento más rápido en más de 10 años. La creciente demanda de energía de la humanidad subraya la importancia de los enfoques de seguridad energética, como la independencia, la diversificación y la interdependencia. En la medida en que las energías renovables puedan ampliar el horizonte de las fuentes de energía posibles -y fiables-, ofrecerán una cobertura contra las fluctuaciones de los precios, las manipulaciones y las restricciones del suministro, y por lo tanto se convertirán en partes importantes de la ecuación de la seguridad energética.   

2. Preocupación por el medio ambiente

No todo es oferta y demanda. La megatendencia de la energía alternativa también está impulsada por la creciente aspiración de proteger el medio ambiente y el hábitat humano. Los desarrollos energéticos alternativos han surgido como una solución tangible que permite a los agentes estatales y no estatales abordar los retos medioambientales más acuciantes, como el cambio climático, la degradación de los ecosistemas y la escasez de recursos esenciales. La ampliación de la "agenda verde" y la creciente demanda de un nuevo ecosistema que reconcilie la existencia y el bienestar humanos con la naturaleza están acelerando el apoyo a las energías renovables. Los estudios que señalan la inmediatez de las amenazas medioambientales provocadas por el hombre, el calor récord y los extensos incendios forestales en el noroeste del Pacífico, y la nueva (y muy ambiciosa) política climática de la Unión Europea "Fit for 55" sólo aumentarán el impulso. En Estados Unidos, bajo la Administración Biden, la presión pública y política para frenar el cambio climático influye en el desarrollo de políticas que potencian las energías renovables. Las cumbres mundiales sobre medio ambiente, aunque sus resultados prácticos sean limitados, promueven constantemente políticas mundiales para mitigar los riesgos del cambio climático.

3. El dictado del crecimiento económico

La seguridad económica es una consideración dominante en los esfuerzos humanos. Implica la búsqueda de un crecimiento estable, la diversidad e independencia económica, la creación de empleo y la resistencia a la volatilidad y a las crisis económicas. El carácter indispensable de la energía para alimentar el crecimiento económico pone de relieve las posibles consideraciones de seguridad económica que hacen avanzar la megatendencia de las energías alternativas, sobre todo por su capacidad para aliviar los riesgos de seguridad económica y contribuir al bienestar general. Se considera que las energías alternativas pueden contribuir a la seguridad económica actual y futura creando nuevas opciones de diversificación económica y actuando como trampolín para el desarrollo de nuevas industrias. El desarrollo de las energías alternativas tiene el potencial de reducir los precios de la energía, liberar recursos para invertir en otros lugares, crear puestos de trabajo, reducir la dependencia de los combustibles fósiles y contribuir a un crecimiento económico estable. En última instancia, los resultados previstos de la megatendencia de la energía alternativa permiten a las economías producir nuevas ventajas competitivas, lo que lleva a los responsables políticos a adoptar los resultados prometidos de la tendencia.

4. La revolución tecnológica mundial

Las nuevas capacidades tecnológicas derivadas de la Revolución Industrial no sólo son motores, sino también condiciones previas de la megatendencia de las energías alternativas. Los avances en conectividad, inteligencia y automatización flexible impulsarán la megatendencia de las energías alternativas al proporcionar soluciones que harán que la generación y distribución de energía a partir de fuentes renovables sea técnicamente factible y comercialmente viable. Sin esta base de conocimientos tecnológicos, muchas de las invenciones necesarias para la comercialización y el uso a gran escala de las alternativas -redes inteligentes, almacenamiento de energía, nuevos materiales y aplicaciones fisicoquímicas- no sólo serían imposibles, sino también inconcebibles.

Liberar todo el potencial de las tecnologías energéticas alternativas actuales depende en gran medida de las soluciones de almacenamiento de energía y de los avances en la red digital. Las transformaciones futuras no se basan estrictamente en el desarrollo de las baterías. Hay otras tecnologías de almacenamiento en la cúspide, como el almacenamiento de gas hidrógeno que puede quemarse en pilas de combustible. Este sistema utiliza nanomateriales para crear una esponja parcialmente flexible que puede atrapar átomos de hidrógeno en sus poros. Otro ejemplo es una batería de flujo basada en el azufre, en la que los iones fluyen a través de una membrana entre un ánodo y un cátodo que contienen azufre. La Revolución Industrial también está transformando la arquitectura de la red digital. Los avances tecnológicos en la red energética, como la visibilidad en el borde de la red, la integración de sensores y el análisis de datos para la generación distribuida, los contratos inteligentes para la gestión de la energía, la demanda flexible y los sistemas de control inteligentes, impulsarán la megatendencia de las energías alternativas.

Los desarrollos energéticos alternativos adquieren impulso incluso cuando se limitan a avanzar en la comprensión tecnológica y carecen de justificación económica. Si a los avances en biotecnología, nanotecnología, tecnología de los materiales y tecnología de la información se añaden los avances en energías alternativas, se refuerza la capacidad de la tecnología para actuar como catalizador del cambio social.

5. La búsqueda de nuevas capacidades militares

Encabezados por Estados Unidos, varios países están cambiando su actitud sobre la importancia militar del uso de energías alternativas, lo que hace que la integración de las energías renovables en el sector de la defensa del siglo XXI sea otro importante motor de la megatendencia de las energías alternativas. El poder adquisitivo del departamento de defensa de Estados Unidos, si se orienta cada vez más hacia el desarrollo y/o la adquisición de tecnologías de energías alternativas, podría contribuir a impulsar la megatendencia. La búsqueda continua de nuevas soluciones energéticas por parte del sector defensa implica la búsqueda de ventajas operativas, ahorro de costes y mejoras de la eficiencia. Está motivada por consideraciones estratégicas, la necesidad de liberar recursos y la necesidad de aliviar la carga que supone la protección de las infraestructuras de combustibles fósiles y las líneas de suministro en los teatros de operaciones.

Las capacidades militares imprevistas que podrían aportar las energías alternativas podrían ser mucho mayores que una mera sustitución de los combustibles fósiles, y podrían ofrecer los medios para alcanzar un nuevo paradigma de defensa. Las actuales plataformas no tripuladas y los dispositivos automatizados de recopilación de información sufren de tiempos de misión restringidos debido a las fuentes de energía de duración y potencia limitadas. Se están desarrollando nuevos equipos para resolver estos problemas, como el Robot Táctico Energéticamente Autónomo, de carácter experimental, o los sistemas inteligentes de gestión de la energía, como el SPM-612 (Squad Power Manager) de Protonex, que pesa menos de medio kilo y emplea energía procedente de muchas fuentes, como la solar, las pilas de combustible y la energía recogida. Los "supersoldados del futuro" necesitarán una serie de nuevas capacidades en materia de comunicación, redes, resistencia, potencia de fuego y alcance. Las tecnologías energéticas alternativas pueden: mejorar las capacidades de combate de los combatientes, mejorar la velocidad y la precisión del mando y el control, permitir a los comandantes llevar a cabo operaciones con una velocidad y cohesión sin precedentes, y ofrecer potencialmente nuevas formas de suministrar energía a zonas específicas del campo de batalla. Las misiones militares modernas no sólo se enfrentan a la violencia asimétrica, la imprevisibilidad, los conflictos enquistados y los estados fallidos, sino que se encuentran en medio de la nueva competición de grandes potencias. Estas consideraciones estratégicas de defensa contribuyen aún más al imperativo de integrar el desarrollo de las energías renovables en la arquitectura de seguridad mundial.

Más allá de los beneficios directos para la defensa, se espera que la comunidad de defensa sirva como fuente de avances tecnológicos, añadiendo impulso a la difusión de las energías renovables. La Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa de Estados Unidos (DARPA) se centra en los descubrimientos e innovaciones científicas de mayor alcance. Con un presupuesto anual de aproximadamente 3.500 millones de dólares, la misión de DARPA se extiende a todos los sectores de la seguridad. Los proyectos de energías alternativas emprendidos por la agencia están impulsando la investigación en múltiples frentes relacionados con la energía: combustible para aviones a base de algas, nanobaterías, energía de las olas, tecnología solar y eólica, pilas de combustible a partir de microbios y tecnologías de la era espacial. Estos proyectos podrían proporcionar avances que podrían aplicarse ampliamente más allá de la comunidad de defensa. A principios del siglo XX, por ejemplo, la combinación del motor de combustión interna y la ametralladora dio lugar a la invención de vehículos blindados y aviones que revolucionaron la guerra. 

6. Nuevos medios de capacitación

Las energías renovables también prometen nuevos poderes para los individuos, las comunidades, los Estados y las entidades no gubernamentales, otorgando la capacidad de transformar los equilibrios de poder y promover su causa. La tendencia promete a los actores estatales nuevos niveles de independencia energética, posicionamiento geopolítico, capacidad de proyección de poder y seguro contra la volatilidad y las crisis. Los desarrollos energéticos alternativos también pueden desempeñar un papel en el empoderamiento de la sociedad civil en el proceso de elaboración de políticas globales. Las energías renovables permiten a la sociedad, especialmente bajo los auspicios de las prioridades "verdes", desafiar a los Estados e influir en las agendas nacionales y extranjeras. Las energías renovables han capacitado especialmente a los individuos para participar en los debates políticos en los ámbitos de la seguridad medioambiental y la salud, la seguridad económica y, cada vez más, la seguridad energética.

7. El imperativo ético

La megatendencia de la energía alternativa recibe un impulso adicional por los imperativos morales cada vez más poderosos. Las energías alternativas encarnan una "bondad" y una "superioridad moral" inherentes al establecer una relación armoniosa entre la humanidad y la naturaleza y dar una respuesta ética a los retos del cambio climático y la sostenibilidad. Así, la historia ha sido testigo de una evolución de la ética asociada a la producción y el consumo de energía, una posición moral que está afectando al comportamiento y al orden social.

Sin embargo, si se observa con más detenimiento, los valores morales que se atribuyen a los desarrollos energéticos alternativos tienen incoherencias inherentes. Esto es especialmente cierto en lo que respecta a los costes asociados al despliegue de las nuevas tecnologías. Uno de los mayores problemas éticos es el impacto que tienen las iniciativas de energía alternativa en los pobres. Dadas las realidades actuales del mercado, la adopción de las energías renovables depende en gran medida de los recursos financieros, lo que hace que, una vez más, la prosperidad sea el reino de los ricos. El rápido desarrollo de los biocombustibles, por ejemplo, presenta sus propios enigmas éticos. El aumento de la proporción de biocombustibles en la combinación energética ha provocado la deforestación y el aumento de los precios de los alimentos, ya que los cultivos previstos para el consumo de alimentos se han desviado a la producción de biocombustibles. Los parques solares y eólicos presentan problemas éticos relacionados con el uso de la tierra.

A pesar de estas y otras incoherencias, como la sociedad atribuye cada vez más valores éticos a la esfera política y económica, las tecnologías energéticas alternativas ofrecen opciones políticas que se sitúan firmemente en el terreno moral, o en el "lado correcto de la historia".

Al final...

Estos 7 impulsores se ven reforzados y canalizados por los marcos normativos nacionales e internacionales que se están uniendo. Cuando se combinan, los motores forman la identidad de la megatendencia de la energía alternativa. Y lo que es más importante, los impulsores de la megatendencia de la energía alternativa están actuando como catalizadores de importantes cambios tecnoeconómicos y sociopolíticos que perturbarán a las personas, las empresas, los gobiernos y las sociedades de formas que hoy apenas podemos imaginar.